Cada año más de 4 millones de niñas son mutiladas, ese fue el caso de Fama, una mujer originaria de Senegal pero que vive en España desde hace décadas, que ha visto como su vida ha cambiado gracias a la reconstrucción genital, que la ha ayudado a “sentirme completa”. “La reconstrucción me ha ayudado a cambiar mi vida, a sentirme completa, pero sobre todo a no tener dolor y a vivir mi vida sexual como siempre debí vivirla, con placer y no con dolor”, explica Fama, que de víctima pasó a ser activista y a hablar con su madre y hermanas en Senegal, para hacerlas partícipe de su lucha. “Tengo una h…