En 2018, una serie de leyes estatales impidieron que una clínica de Planned Parenthood en Columbia, Missouri, siguiera practicando abortos. Poco después, la clínica envió parte de su equipamiento a otros estados donde el aborto seguía siendo accesible. Las sillas especiales, los equipos quirúrgicos y la iluminación de la clínica de Missouri —equipo costoso y en perfectas condiciones— todavía podían ser útiles en otros centros de salud administrados por la misma filial, Planned Parenthood Great Plains, en sus otros tres estados. Gran parte del equipo viajó a Oklahoma, donde la organización esta…